Glucosa alta, por qué se produce y como controlarla
¿Sabías que puedes tener la glucosa alta y no presentar ningún síntoma? Así es, además esto tiene complicaciones severas, pero afortunadamente es posible controlar los niveles de glucosa. Te explicamos esto a continuación.
¿Cuándo se habla de glucosa alta?
La glucosa alta en sangre también es conocida con el nombre de hiperglucemia. Hace referencia a que el azúcar en sangre está por encima de los límites normales. Es decir, una cifra menor de 100 mg/dL (miligramos por decilitro) en ayunas (ADA, 2022a).
Un nivel de glucemia en sangre (en ayunas) entre 100 a 125 mg/dL sugiere prediabetes. Mientras que los niveles iguales o superiores a 126 mg/dL sugieren diabetes (ADA, 2022a).
Causas de la elevación de la glucosa
La diabetes y prediabetes son las principales causas de la glucosa alta. Sin embargo, la hiperglicemia puede deberse también a otras causas, como (CDC, 2021; MedLine PLus, 2020a):
- Estrés emocional excesivo.
- Un accidente, cirugía o infección.
- Enfermedades de las encías.
- Deshidratación.
- Complicaciones agudas de la diabetes (cetoacidosis y estado hiperosmolar no cetósico).
- Saltarse los medicamentos de la diabetes o la insulina.
Signos y síntomas para identificar la glucosa alta
La glucosa elevada puede ser silente en muchos casos; ya que los síntomas solo aparecen cuando los niveles de glicemia en sangre superan los 180 mg/dl. No obstante, los síntomas pueden ser (Mayo Clinic, 2021; MedLine PLus, 2020a).
- Estar muy sediento y tomar demasiada agua.
- Boca y piel muy secas.
- Debilidad o cansancio excesivo.
- Necesidad de orinar con más frecuencia de lo normal, tanto de día como de noche.
- Aliento con olor a fruta.
- Nauseas o vómitos.
- Falta de aire.
- Desorientación o coma.
Es importante recalcar que algunas personas con diabetes tipo 2 de larga data pueden no presentar síntomas, aun cuando tengan la glucosa muy alta (Mayo Clinic, 2021). Por eso, la Asociación Americana de Diabetes (2022) sugiere empezar con el descarte de prediabetes o diabetes entre los 35 y 45 años, incluso si no presentan síntomas. Además, que los pacientes con diabetes realicen automonitoreo frecuente para descartar la hiperglicemia.
Complicaciones de la glucosa alta
Identificar y tratar a tiempo la hiperglucemia en la diabetes es esencial. Ya que la glucosa alta puede conllevar complicaciones agudas muy graves que ponen en peligro la vida. También puede originar complicaciones crónicas que alteren la calidad de vida. Estas son (Rewers, 2018; Mayo Clinic, 2021):
Complicaciones agudas
- Estado hiperosmolar hiperglucémico: se caracteriza por una elevación de la glucosa en sangre superior a 600mg/dl. Acompañado de otros signos y síntomas como: vómitos y alteraciones de conciencia.
- Cetoacidosis: se produce por un déficit de insulina, aparece una elevación de glucosa mayor a 300mg/dl.
- Acidosis láctica: los síntomas que la caracterizan aparecen de forma brusca, estos son deshidratación, dolor abdominal y taquipnea.
- Hipoglicemia: niveles de glucosa menos a 60mg/dl.
Complicaciones crónicas
- Enfermedades del corazón y vasos sanguíneos, como un infarto.
- Daño de los riñones.
- Problemas en los pies que pueden ser úlceras, deformaciones o infecciones graves.
- Daños en los nervios.
- Pérdida de la visión por daños en la retina o el cristalino.
- Infecciones recurrentes de orina, dientes y encías.
- Problemas en los huesos y las articulaciones.
Signos de alarma
Si presentas cualquiera de estos síntomas necesitas ser atendido inmediatamente por un médico (Mayo Clinic, 2021):
- No toleras alimentos líquidos ni sólidos.
- Tus niveles de glucosa están por encima de 240 mg/dL.
- Tienes vómitos y diarrea recurrente.
- Fiebre durante más de 24 horas.
¿Cómo controlar los niveles de glucosa?
Existen 4 medidas básicas que pueden ayudarte a controlar los niveles de glucosa en la sangre. Estas son (MedLine PLus, 2020b):
- Llevar una alimentación balanceada. Priorizar las frutas y verduras, y disminuir los azúcares en comidas.
- Realizar ejercicio físico regularmente. Esto es, al menos 30 minutos de actividad física 5 días por semana.
- Tomar los medicamentos para la diabetes indicados. En el caso de usar insulina es primordial saber usarla de forma correcta.
- La última pero no menos importante, hacer el automonitoreo de tus niveles de glucosa con un glucómetro.
¿En qué momentos realizar el automonitoreo?
A decir verdad, el automonitoreo es la forma más práctica de conocer con certeza el nivel de azúcar en la sangre. Se puede realizar en los siguientes momentos:
- En ayunas.
- Antes de desayunar.
- 2 horas posteriores al desayuno.
- Antes del almuerzo.
- 2 horas después del almuerzo.
- Antes de la cena.
- 2 horas después de la cena.
- Previo a hacer ejercicio.
- Antes de las meriendas y de realizar tareas críticas como conducir.
Esto permitirá al paciente tomar decisiones oportunas en cuanto a la ingesta de alimentos y a la práctica de ejercicio. La frecuencia del automonitoreo puede variar en cada persona, y se vuelve más estricta en los pacientes que se controlan con insulina (Diabetes Care, 2021).
Además, te brinda la posibilidad de ser consciente sobre lo que sucede en tu cuerpo. También es un dato esencial para el médico, ya que el historial del automonitoreo le da una idea más clara del comportamiento de tu organismo para establecer el tratamiento (ADA, 2022b).
La glucosa alta es un problema de salud importante que puede ser, en un inicio, el único signo de la diabetes. Para los pacientes con diabetes, una de las primeras señales de alguna complicación. Por eso, es esencial llevar el control de los niveles de glucosa con el automonitoreo e iniciar hábitos saludables que permitan regular los niveles de glicemia.