Escala de Framingham y su eficacia predictiva
Escala de Framingham es la prueba que evalúa el riesgo cardiovascular de un paciente, basándose en sus factores biológicos y sus hábitos. Algunas de estas enfermedades son el infarto al miocardio, la falla cardiaca, enfermedad arterial periférica, etc. (Boston Medical Center [BMC], 2020).
Origen de la escala de Framingham
Esta escala nació de un estudio conocido como el Framingham Heart Study, un estudio longitudinal que inicio en 1948 y sigue en curso. Este se ha dado a la tarea de recopilar datos prospectivos sobre factores de riesgo biológicos y hábitos. Además, toma en cuenta su relación con un conjunto de enfermedades cardiovasculares (BMC, 2020).
Son muchos los beneficios que ha aportado este estudio; puesto que funciona como una base datos bastante amplia sobre factores de riesgo cardiovasculares convencionales y nuevos. De hecho, uno de sus aportes más significativos es la escala de Framingham, la cual es muy útil en la medicina preventiva.
¿Cuál es la utilidad de esta escala?
El principal uso de esta escala es ayudarle al médico y al paciente a decidir cuándo es momento de empezar a aplicar medidas para disminuir el riesgo de futuros eventos cardiovasculares. Además, es una muy buena herramienta para educar al paciente en términos de tratamientos y modificaciones de vida (Boston Medical Center [BMC & Revista de salud, 2017).
Por supuesto, otra utilidad significativa está en la práctica de la cardiología preventiva. Esto se debe a que, al demostrar que un paciente posee un alto riesgo de sufrir un evento cardiovascular, hay una reducción en la mortalidad y morbilidad por dichas razones.
Algunos de los principales logros del estudio de Framingham, son el haber demostrado que (BMC, 2020):
- Fumar cigarrillos incrementa el riesgo de presentar enfermedades cardiacas.
- Los niveles altos de colesterol, el porcentaje de grasa y las anormalidades electrocardiografías también aumentan esos riesgos.
- La actividad física y los niveles altos de HDL, disminuyen la probabilidad de morir por una cardiopatía.
- La menopausia aumenta el riesgo de padecer enfermedades cardiovasculares.
¿Qué parámetros evalúa esta escala y cómo interpretarlos?
Los parámetros evaluados en la escala de Framingham clásica son (BMC & Revista de salud, 2017):
- la edad
- las lipoproteínas de alta densidad (HDL)
- el colesterol total
- las cifras de presión arterial sistólica
- el hábito tabáquico
- la presencia de diabetes
Estos parámetros le asignan al paciente un porcentaje de riesgo de presentar eventos cardiovasculares en los siguientes 10 años. Un porcentaje mayor al 20 % es riesgo alto, entre 10 y 19 % es riesgo intermedio y menor a 10 % es riesgo bajo.
Es lógico asumir que la escala de Framingham tiene limitaciones y la verdad es que sí las tiene. Por ejemplo, esta escala no toma en cuenta los antecedentes familiares del paciente. Tampoco, la presencia de disfunción endotelial ni mediciones importantes como el índice tobillo–brazo, la circunferencia de la cintura, etc.
Ventajas y desventajas de la escala de Framingham
Las principales ventajas del uso de esta escala son preventivas; es decir, nos ayuda a disminuir la probabilidad de que una persona desarrolle un evento cardiovascular que pueda incapacitarlo. Al conocer el riesgo es más fácil para el médico tomar una decisión.
Las principales desventajas son la gran cantidad de limitaciones que tiene la escala de Framingham clásica. Los primeros pacientes que conformaron la muestra de ese estudio eran norteamericanos con una edad media de 45 años. Esto implica que se excluye a muchas personas; por lo cual, los resultados son arbitrarios y, a su vez, no se pueden universalizar.
El hecho de que la escala sea tan limitada en los parámetros que evalúa la vuelve un instrumento muy general. En especial, al considerar que hay una relación importante entre sus resultados y factores como la circunferencia de cintura, los niveles de glucosa en ayunas y la presión diastólica (Chung et. al., 2018).
¿Esta escala es ventajosa en pacientes con diabetes?
Una puntuación alta en esta escala implica la necesidad de aplicar hipolipemiantes y cambiar el estilo de vida. Ambas cosas beneficiarían bastante a un paciente con diabetes.
Sin embargo, se ha demostrado que la escala suele subestimar los riesgos en personas que viven con esta enfermedad. Además, el puntaje no mide si el paciente posee una glicemia controlada o no, que es un factor importante. De manera que, no es recomendable confiar ciegamente en esta escala, pero sí utilizarla como una herramienta en el paciente con diabetes.
Referencias
Boston Medical Center [BMC]. (2020). Estudio de Framingham.
Boston Medical Center [BMC], & Revista de salud. (2017). Puntuación de riesgo de Framingham para la estimación del riesgo de enfermedades cardiovasculares a 10 años en pacientes con síndrome metabólico.
Chung, G.E., Park, H.E., Lee, H. et al. Clinical significance of increased arterial stiffness associated with atrial fibrillation, according to Framingham risk score. Sci Rep 11, 4955 (2021).